martes, 1 de junio de 2010

Inmortalidad (parte 3)

Hasta aquí he puesto sólo lo positivo de ser inmortal, pero hay puntos malos. Sí, lo de vivir por siempre debe de ser interesante por el aspecto de poder aprender diversas cosas a lo largo de una extensa vida, pero finalmente llega la hora en la que nos damos cuenta de algunos detalles terroríficos. A continuación, las desventajas de cada forma de inmortalidad, no sé si hiera suceptibilidades de algunos con lo que diré, pero lo dudo realmente. Empecemos:

Lo malo de la Inmortalidad divina:

No sé si han oído la leyenda de los dioscuros. Bueno, si no ha sido así pues cuenta la historia de dos hermanos que eran hijos de Zeus, pero que sólo uno nació inmortal. El destino dictó que el más impulsivo fuera el mortal y en un combate, murió. El hermano inmortal se pasó día llorando junto al cadáver, sabiendo que sin importar lo que pasara, nunca podría reunirse con su hermano pues a diferencia suya, jamás moriría. Sufruría eternamente la ausencia de su hermano sin poder soportarlo. Tan grandes fueron sus súplicas a los dioses que estos finalmente le dieron la paz al elevarlo junto a su hermano y convertirlos en la constelación de Géminis.

Y sí, esto es lo malo de esta clase de inmortalidad. Tú vives y los demás mueren. Ahora si eres de los que creen que después de la muerte nos toca el juicio final que decidirá que vayamos al Cielo o al Infierno pues te haré una pregunta... ¿y si no estás en la religión correcta? ¿y si a ti te toca el Cielo, pero a alguien querido no? Pasarás la eternidad contemplando un cielo sin las personas que alguna vez apreciaste en vida o peor, viendolas sufrir en el infierno. La verdad ni me gusta pensar en esta perspectiva, pero es más que seguro que pasará en más de un caso.

Lo malo de la inmortalidad de muerto viviente:

Si eres un cadaver andante pues el pasar de los años no te hará sentir mejor. Es más, es probable que tu condición empeore lo que te deje con las desventajas de la inmortalidad anterior.
Si tienes la suerte de no ser un cadaver andante, pues el que tu apariencia sea humana sólo te deja con la desventaja de ver morir a las personas que más quieres, eso y además del hecho de que ser un vampiro o similar incluye el tener un secreto que no puedes revelar a la gente cercana a ti y que te hará sentir siempre fuera de lugar.

Lo malo de la inmortalidad por magia:

Ni la magia más poderosa podrá mantener vivo a una persona por siempre. En el caso de elfos y hadas aún podían ser muertos de manera violenta o con ciertas maldiciones que sobrepasaran su poder. El fin de una vida para estos era una bendición pues muchos solían sufrir con la pérdida de sus amigos y familiares. En el caso de algunos elfos, el tener una prodigiosa memoria les hacía almacenar hasta siglos de vivencias tristes.
Y en el caso de los magos sin ecrúpulos que buscaban ser inmortales, pues vivían en constante preocupación de mantenerse inmortales pues esto suele requerir un método complicado que debe repetirse casa cierto tiempo o de lo contrario morirían como cualquier otro. Realmente el vivir una vida llena de angustia no es realmente vivirla en mi opinión.

Lo malo de la inmortalidad con súper poderes:

Si puedes naturalmente vivir por siempre y no envejecer ni tener que preocuparte por mantenerte así, pues sólo queda una cosa que combatir: el aburrimiento. Y la verdad es simple, una vez pasado cierto número de años verás que ya te quedan pocas cosas por hacer y que realmente quisieras tener algo interesante en que dedicar tu tiempo... ¿Tener una familia? ¿Cómo tenerla si verás morir a tus nietos y bisnietos sin poder?

¿Estudiar? Podrías aprender cada cosa que existe y seguir aprendiendo cada cosa nueva que sale, pero eventualmente cada cosa te empezaría a parecer repetitivo y tal vez estresante. A menos que seas de mentalidad abierta también, esto te podría generar muchos conflictos pues el pensamiento humano va cambiando y podrías quedarte con el pensamiento radical de épocas pasadas, lo que no resulta muy bueno para ninguna de las partes involucradas.

Ser inmortal a corto plazo de seguro sería genial y divertido, pero a largo plazo te deja bastante resentido. Serías incapaz de amar sabiendo que cada persona que conoces morirá. Tendrías que vivir viendo como todo cambia a tu alrededor y tú sigues igual. Creo que eso bastaría para volver loco a cualquiera.

Y apenas vamos por la primera parte...

Nos leemos...